Como el dominó crea un escape para los dominicanos en Washington Heights

Para los dominicanos, el dominó es mucho más que un simple juego––es un estilo de vida

By Lisa Salinas | Dec. 12, 2019

 

El dominó es un juego lleno de pasión y cultura para los dominicanos en Washington Heights. (Lisa Salinas/NYCity News Service)

Al caminar por la avenida Broadway, entre las calles 163 y 164, en Washington Heights es probable encontrar a unos hombres gritando, ya sea en victoria o por frustración, sentados junto a una mesa de dominó.

¡Te gané, te gané! ¡Tú no sabes más que yo! Esas son las frases que usan”, dice San Francisco Filix Araujo, residente de Washington Heights por más de 33 años.

San Francisco Filix Araujo,56, es un padre de 5, quien se divierte jugando el dominó. “¡Ah el énfasis de la victoria!”. (Lisa Salinas/NYCity News Service)

Al dominó se le llama el ajedrez de los dominicanos, y pertenece a la cultura. Araujo aprendió jugar dominó en la República Dominicana porque es una fuerte tradición familiar.  

“[Yo he jugado] desde pequeño, desde que mi abuelo y mi padre jugaban siempre”, dijo.

De acuerdo con un reporte de la Oficina del Censo, la mitad de la población de Washington Heights nació en otro país. El 65% de estos residentes son dominicanos.

Alrededor de uno de cada cuatro personas en la comunidad son de origen dominicano. Por eso no es extraño que esta comunidad sea un pedazo de la República Dominicana en Nueva York. 

Sibylle Fischer, profesora en el Centro de Estudios Caribe y Latinoamericanos en la Universidad de Nueva York, dice que la migración de los dominicanos a Manhattan se debe a un movimiento político en los años 60. 

“La migración realmente no empezó hasta después de la caída de Trujillo”, dijo Fischer. “Era un tiempo de inestabilidad. Trujillo tuvo un régimen nacionalista y fascista. La gente no pudo conseguir visas de salida”. 

Araujo dijo que en el verano, las calles alrededor de Broadway se llenan de jugadores de dominó. Añadió que ahora con el alza de renta y cambio de demografía inevitable, algunos dueños son más estricto y no permiten que los jugadores de dominó estén frente a ciertos edificios. 

La asambleísta Carmen De La Rosa, quien representa Washington Heights en su distrito, dijo que esto es depende de caso a caso. 

“He visto muchos jugando en parques y en frente de negocios que comprenden y valoran la conexión cultural del juego”, De La Rosa dice. 

Para de la De La Rosa y su familia, el juego de dominó siempre ha estado presente. Ella recuerda que cuando se crió en Inwood, su padre y sus vecinos jugaban en los parques y banquetas.  

Araujo, quien trabaja en construcción, dijo que cuando no está trabajando o ocupado, juega dominó. 

“Para nosotros, es nuestra historia”, dijo Araujo. “La comunidad, los vecinos––normalmente todo los que participa siempre son amigos. Puede participar cualquiera que venga, ni importa ni el país ni la raza que sea, pero siempre es un juego entre amigos para pasar el momento”. 

Milagros Ricourt, profesora en el departamento de estudios Latinos y de Latinoamérica en Lehman College, dice que cuando migrantes han alcanzado sus destinaciones final, ellos tratan de reproducir lo que han tenido en sus propios países. 

“Es buenísimo para su identidad”, expresó Ricourt. “Cuando vienen a un lugar extraño, con diferente idiomas y culturas, normas y reglas, aferrándose a sus tradiciones es muy importante––es algo que los define”. 

De hecho Ricourt, una dominicana, también juega el dominó. Como Araujo, Ricourt lleva jugando desde niña. Aunque aseguró que es buena, dijo que no la encontrarás jugando en la calle Broadway. 

“Nosotras como mujeres estamos en el ambiente privado”, compartió Ricourt. “Los hombres tienen que conquistar el área publico. La mayoría de gente que ves jugando dominó en la calle Broadway son hombres”.

Julio Fermen, quien ha vivido en Washington Heights por casi 40 años dijo que el dominó es una manera de olvidar la conmoción de la vida diaria.

“Por la situación que estamos viviendo a nivel nacional e internacional, eso te hace disipar la mente”,explicó. “Nosotros también estamos con muchos problemas. El dominó es una forma de escapar la mente, aclarar”.